En el caso histórico de la redistribución de distritos, la Corte Suprema se negó a detener la manipulación de los distritos electorales. En respuesta, estamos intensificando nuestros esfuerzos a nivel estatal.
En 2016, Common Cause presentó una demanda en respuesta a los distritos electorales del Congreso trazados por la legislatura de Carolina del Norte, calificando el mapa de manipulación partidista que violaba la Constitución de Estados Unidos.
La manipulación partidista de los distritos electorales, o el acto de crear distritos electorales que favorecen a un partido sobre otro, silencia a los votantes y les priva de la capacidad de elegir a los candidatos de su elección.
Aunque la Corte Suprema de Estados Unidos finalmente dictaminó en 2019 que las manipulaciones partidistas de los distritos electorales no pueden ser impugnadas en un tribunal federal, el extenso trabajo de Common Cause utilizando el caso para educar al público resultó en una atención nacional sin precedentes sobre la necesidad de una reforma de la redistribución de distritos.
Tras la decisión, Common Cause está centrando su atención en lograr reformas en los estados.
¿Por qué es importante esta pelea?
Mientras los políticos partidistas y los miembros del partido tengan la capacidad de trazar distritos sin restricciones a puertas cerradas, la utilizarán en su propio beneficio. Por eso, la única solución garantizada y permanente al gerrymandering es aflojar el control que los legisladores interesados tienen sobre el proceso.
Common Cause se ha comprometido a realizar múltiples luchas a nivel estatal para aprobar reformas imparciales de redistribución de distritos (como comisiones ciudadanas independientes guiadas por el equilibrio partidista, estándares no partidistas claros y transparencia) para garantizar que cada voto cuente y que cada votante esté representado de manera justa.
¿Qué pasa ahora?
No existe una solución única para acabar con la manipulación de los distritos electorales. Estamos luchando para revocar mapas injustos en los tribunales estatales, además de trabajar en iniciativas electorales y propuestas legislativas contra la manipulación de los distritos electorales en estados de todo el país.
Pero no podemos ganar esta batalla de un solo golpe. Tendremos que trabajar duro, estado por estado y mapa por mapa. Por eso, Common Cause está preparada para luchar a largo plazo y hacer lo que sea necesario para garantizar que el pueblo, no los políticos partidistas, tome las decisiones en nuestra democracia.
Su apoyo financiero nos ayuda a generar un impacto al: Hacer que el poder rinda cuentas y fortalecer la democracia.
La evidencia obtenida por Common Cause confirma cómo los operadores políticos pasaron años conspirando para manipular nuestra democracia con una pregunta sobre ciudadanía en el Censo. El principal cerebro de la manipulación de distritos electorales del Partido Republicano, Thomas Hofeller, presentó un plan para agregar la pregunta sobre ciudadanía al Censo. ¿El propósito? Manipular nuestro proceso de censo y redistribución de distritos para que sea, en palabras de Hofeller, "ventajoso para los republicanos y los blancos no hispanos".
La Corte Suprema elude su responsabilidad de poner fin a la manipulación de los distritos electorales
Hoy, la Corte Suprema de Estados Unidos emitió una decisión por 5 votos a 4 en dos casos históricos de redistribución de distritos, Rucho v. Common Cause y Lamone v. Benisek. En una decisión de 34 páginas escrita por el juez Roberts, la mayoría concluyó que no podía establecer un estándar constitucional contra la manipulación partidista de los distritos electorales.
