Los estadounidenses esperan y merecen representantes electos que pongan en primer lugar los intereses de sus electores y la salud de nuestra democracia, especialmente cuando ambos se ven amenazados por una pandemia. Pero en cambio, el paquete de ayuda COVID-19 de los republicanos del Senado, que se esperaba desde hace mucho tiempo, socava la precisión del censo de 2020, otorga a las corporaciones la inmunidad por la que han presionado, recorta la ayuda semanal por desempleo y perjudica a nuestra democracia, todo de una sola vez. La demora del Senado en la aprobación de este paquete de ayuda ya permitió que expirara la moratoria de desalojos de la Ley CARES, lo que probablemente agregue la privación de derechos a la serie de problemas que alteran la vida de miles de estadounidenses que recientemente se quedaron sin hogar.

Incluso el aumento propuesto en la financiación del censo es una pista falsa, ya que ignora el cronograma extendido que los funcionarios del censo de carrera dicen que se requiere para un recuento preciso a la luz de los obstáculos creados por la pandemia. Requeriría que el recuento se llevara a cabo según un cronograma que dejaría a demasiados residentes sin contar. Esta medida en el proyecto de ley del Senado se hace eco de los intentos de la Casa Blanca de socavar la precisión del censo para obtener ventajas políticas partidistas, dejando a los más pobres y más difíciles de contar subcontados y subrepresentados en el Congreso y sin fondos suficientes cuando se trata de servicios esenciales como hospitales, escuelas y carreteras.

La propuesta del Senado tampoco proporciona fondos adicionales para los funcionarios electorales estatales y locales que tienen problemas de liquidez y que agotaron sus presupuestos al celebrar elecciones primarias durante una crisis de salud pública. El derecho a votar y a hacerlo de forma segura debería ser una prioridad para el Congreso, no un medio para suprimir el voto. El proyecto de ley no prevé nada para el Servicio Postal de los Estados Unidos (USPS), del que se dependerá en gran medida en las próximas elecciones para entregar las solicitudes de votación y las papeletas a tiempo para permitir que todos los estadounidenses hagan oír su voz en las urnas. Una vez más, esta medida sigue el ejemplo de una Casa Blanca decidida a socavar la eficacia del Servicio Postal en vísperas de una elección.

Además, este proyecto de ley no incluye fondos para ayudar a proporcionar un servicio de banda ancha confiable a todos los estadounidenses en un momento en que todos los hogares dependen de la conectividad como nunca antes, desde la búsqueda de empleo, el teletrabajo y el aprendizaje en casa hasta la telesalud, la solicitud de un voto por correo y mantenerse informado sobre la pandemia. Nunca debemos dejar a amplios sectores de nuestra sociedad sin los servicios vitales que necesitan, y en estos tiempos la banda ancha confiable se ha convertido en un servicio esencial. El paquete tampoco proporciona fondos adecuados para los medios de comunicación locales, que siguen siendo una fuente fundamental de noticias e información mientras las comunidades atraviesan la pandemia a pesar de ver cómo se agotan sus fuentes de ingresos.

Ahora es un momento en el que el Congreso debería brindar un salvavidas a nuestra democracia en lugar de intentar utilizar un paquete de ayuda para la pandemia como un vehículo para suprimir el voto. Pero lamentablemente, a eso se reduce este proyecto de ley del Senado al final del día. Instamos firmemente a los senadores republicanos de base a que se enfrenten a sus líderes para fortalecer este proyecto de ley y convertirlo en uno que anteponga la salud de nuestra democracia a la conveniencia política.

Hacemos un llamado al Senado para que apruebe la Ley de Héroes, que la Cámara de Representantes aprobó en una votación bipartidista hace más de dos meses. La Ley de Héroes incluye muchas disposiciones para fortalecer nuestra democracia, como extender los plazos de presentación de informes del censo y proporcionar fondos para nuestras elecciones, el Servicio Postal de los EE. UU., el acceso a la banda ancha y el periodismo local. Además, la Ley de Héroes proporciona miles de millones de dólares y asistencia para el alquiler de viviendas para propietarios e inquilinos a los estadounidenses que enfrentan dificultades en la economía paralizada por la pandemia, incluidos aquellos que enfrentan un desalojo después de que la demora del Senado permitió que expirara la moratoria de desalojos de la Ley CARES.