Common Cause lleva más de 50 años luchando contra la influencia del gran dinero en la política. Encabezamos la campaña para derrotar la Enmienda 6 en la boleta electoral de 2024 y ganamos.

La Enmienda 6 fue derrotada porque los floridanos saben que los votantes deben influir en las elecciones, no los grandes donantes de dinero.

La enmienda 6 fue puesta a votación por la Legislatura de Florida, no por el pueblo de Florida. Proponía derogar el Artículo VI, Sección 7 de la Constitución de Florida, que exige que el estado tenga un programa de financiación pública para los candidatos a gobernador y gabinete que acepten límites de gasto. Si se aprobaba, también habría derogado toda la Ley de Financiación de Campañas Electorales de Florida. Se habría eliminado la larga tradición de financiación pública de Florida, que se remonta a la década de 1980. Pero el pueblo de Florida no permitió que se aprobara.

¿Qué es el programa de financiamiento de campañas públicas de Florida?

Es un programa que iguala las pequeñas donaciones de campaña realizadas por los residentes comunes de Florida.

El propósito del programa está definido en las Leyes de Florida: “hacer que los candidatos sean más receptivos a los votantes del Estado de Florida y estén lo más aislados posible de los grupos de intereses especiales”. Ése es el programa que la Enmienda 6 intentaba eliminar.

La financiación pública es parte de la solución al problema del dinero en la política porque aumenta el compromiso entre los candidatos y los votantes que buscan representar, hace que los electores sean más importantes para las campañas y alienta a los líderes electos a ser más receptivos a las comunidades a las que sirven.

La Enmienda 6 fue derrotada porque los floridanos saben que no es necesario ser rico para postularse a un cargo.

Los floridanos no quieren un gobierno estatal que sólo tenga millonarios y multimillonarios en el poder.

Queremos líderes electos que entiendan nuestra vida cotidiana; líderes que promulguen políticas que aborden los desafíos reales que enfrentamos.

El financiamiento público de campañas no sólo abre las puertas a candidatos que de otra manera no podrían dar el salto financiero para postularse a un cargo, sino que también hace que los electores sean más importantes para las campañas e incentiva a los líderes electos a ser más receptivos a las comunidades a las que sirven.

Llevar a cabo una campaña estatal eficaz es increíblemente caro en Florida. Esto desalienta a las personas buenas a postularse para un cargo si no son ricas. La financiación pública de las campañas ayuda a fomentar un grupo de candidatos más diverso y permite que más ciudadanos comunes de Florida se animen a postularse para un cargo.

La Enmienda 6 fue una continuación de la historia de los grandes intereses especiales del dinero que intentaban consolidar el poder. Y fue otro ejemplo más de la impopular misión de la Legislatura de Florida de reducir la influencia de los ciudadanos de Florida en nuestro gobierno. Pero nosotros, los habitantes de Florida, demostramos que cuando nos unimos podemos luchar y podemos ganar.